Empate agridulce del Real Oviedo
ante un buen Ourense en el partido que cerraba la octava jornada en el Grupo I.
Exceptuando la baja por lesión de última hora de Owona, los azules repitieron
el once que se llevó la victoria ante el Rayo “B”, pero también repitieron
errores que impidieron sumar los tres puntos.
Los minutos iniciales fueron de
dominio local, un córner forzado por Iker Alegre y un lanzamiento defectuoso de
Óscar Martínez fueron los primeros –y únicos- avisos. Pero pronto se pudo
comprobar que el Ourense no venía a cerrarse ni mucho menos, los gallegos
comenzaron a soltarse, tocando bien el balón y llegando con peligro,
sintiéndose cómodos en un campo grande como el Tartiere.
El Oviedo pasó de llevar la
iniciativa a limitarse a intentar sorprender en algún contragolpe o sacando partido
de algún error defensivo de los gallegos, dominadores durante buena parte del
primer acto. Sanginés fue el jugador visitante más destacado, tuvo un par de
ocasiones y fue un incordio para la defensa azul entrando normalmente por el
lado derecho del ataque orensano.
Mucho tenían que cambiar las
cosas en el segundo tiempo para hacer olvidar las malas sensaciones por parte
oviedista, la cosa empezó más o menos igual hasta que apareció Manu Busto. En
el minuto 51 abría la lata con una gran jugada marca de la casa, encarando
desde la izquierda y colocando la pelota con la derecha en el segundo palo; una
acción al más puro estilo del cántabro que encarrilaba el partido para los
locales, a quienes la alegría casi les dura sólo un minuto, el tiempo que tardó
Pablo Pillado en disparar con fuerza desde fuera del área obligando a Dani
Barrio a sacar una mano salvadora.
El gol espoleó al Oviedo, la
salida de Xavi Moré en el lugar del discutido -con cierta razón- Iker Alegre contribuyó más
todavía a que los locales llegasen con mayor peligro, suyas fueron dos acciones
que pudieron suponer la sentencia, en una de ellas de nuevo Busto culminaba la
jugada con calidad pero sin acierto en el área pequeña. Quien sí acertó fue el
“9” visitante Jona,
que en el 73 cabeceaba sin oposición a la red un centro desde la derecha y
hacía subir al marcador un resultado más acorde a lo visto hasta ese momento.
Justo cuando el Ourense
atravesaba su peor momento llegó ese tanto balsámico que dio paso a los
momentos más emocionantes del duelo, con un Oviedo, ahora sí, lanzado a tumba
abierta en busca del segundo gol; a punto estuvo de llegar con un cabezazo de
Cervero –relevo de un apagado Óscar Martínez- que se fue inexplicablemente
fuera y un fuerte disparo de Xavi Moré que despejó brillantemente Pato Guillén.
Finalmente reparto de puntos y
otros dos que vuelan del feudo ovetense, cierto que el Oviedo tuvo buenas
ocasiones en sus mejores momentos del segundo tiempo, pero pagó caro el haber “regalado”
prácticamente medio partido. Sarriugarte declaró sentirse satisfecho con el
juego de los suyos, yo no lo tendría tan claro visto lo visto en los primeros
45 minutos, el equipo tiene potencial para ofrecer algo más como local y no puede
limitarse a mostrar pequeñas pinceladas cuando la necesidad obliga.
Foto: elcomercio.es |
FICHA DEL PARTIDO:
Domingo, 14 de octubre de 2012.
Estadio Nuevo Carlos Tartiere (6865 espectadores).
Real Oviedo 1.- Dani
Barrio; David Fernández, Baquero, Mantovani, Javi Cantero; Aitor Sanz,
Cerrajería; Javi Casares, Manu Busto, Íker Alegre (Xavi Moré ‘63); Óscar
Martínez (Diego Cervero ‘74)
Ourense 1.-: Pato;
Yosu, Campillo, Capi, Claudio; Borja Yebra, Álex Fernández; Sanginés (Iván
González ‘60), Noguerol (Padrón ‘78), Pablo Pillado (Borja Valle ‘69); Jona
Goles: 1-0, Manu
Busto ’51; 1-1, Jona ‘73
Árbitro: Suberbiola
Zuñiga (Comité Territorial vasco), mostró tarjeta amarilla a Martín Mantovani y
Borja Yebra.
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